Le pasó a la prima de la novia de un amigo

Resulta que esta chica sale una noche a bailar, y en la discoteca conoce a un muchacho, con el cual decide retirarse y pasar la noche. Al cabo de unos días, ella descubre un zarpullido extraño en la boca, por lo que decide visitar a su dermatólogo. Cuestión que cuando el médico la revisa, éste comienza a hacerle todo tipo de preguntas sobre su vida sexual; si tiene pareja estable, cuándo fue la última vez que tuvo relaciones, con quién, etc. Ella confiesa haberse acostado con un desconocido, pero que parecía muy buena persona y todo lo demás, y que de hecho planea verlo otra vez esa misma noche, que aunque no lo conoce demasiado tiene un buen presentimiento, y se sorprende de todas esas preguntas. En ese momento el médico le pide que no se alarme, pero le dice que no le recomienda que lo vea nuevamente, y efusivamente le pide que llame a la policía. El zarpullido provenía de un tipo de bacteria que sólo se contagia por el contacto sexual con un difunto. Su nuevo amigo, al parecer, trabajaba en una funeraria y era necrófilo.

No me lo creen? Lo bien que hacen. Si, queridos amigos, la página que les acercamos hoy se dedica a compilar y desmentir todo tipo de mitos urbanos, desde las leyendas más clásicas como que la coca cola cura el cáncer hasta el congelamiento de Walt Disney, pasando por la que les acabo de contar y muchas otras.

Se llama Snopes y, agrupándolas en distintas categorías, compila una enorme cantidad de rumores, leyendas urbanas, y cadenas locas que circulan por la vida y por la Internet. Pero la página no sólo se detiene allí, sino que además de mostrar las distintas versiones de cada una de estas historias, recopila la mayor cantidad de información que encuentran sobre ellas; quién las creo, dónde, por qué, cómo se extendieron, para qué se las hizo, y qué cosas tienen de cierto. Muchas leyendas nacen de verdades que se exageran, y esta página separa la paja del trigo, la realidad de la ficción.

Es muy interesante para recorrer, y puede ser muy útil la próxima vez que estemos en alguna reunión social y alguien quiera hacerse el canchero contando alguna historia tontoloca queriendo que nos comamos un bolazo. Nosotros podremos decirle, muy tranquilos: "Qué hambre que tenés, papá!"

Snopes, acá. (está en inglés)

PD: De hecho, la historia con la que comienza el post me la contó la novia de un amigo, que se la había contado un conocido. En esta página aparece (prueba suficiente de que es una historia de mentira que circula por todas partes), y encima explica que no existe tal enfermedad.

Ojo, lo que no encontré en esta página es qué pasa si mezclamos vino con sandía, así que cuidado amigos, mejor no lo intenten en casa.